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"Las bicisendas tienen que tomar una dimensión más urbana"

Periodista:
Roger Greeno
Publicada en:
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POR GRACIELA BADUEL - gbaduel@clarin.com

 

Teórico, crítico y codirector del Master Laboratorio de la Vivienda del siglo XXI en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona, Josep María Montaner está en la Argentina, “por tercera vez en lo que va del año”. Llegó para participar de la Bienal, por supuesto, pero además viajará a Santa Fe para presentar su último libro, Arquitectura y política (coescrito con Zaida Muxí) que, víctima de las restricciones a la importación, aún no ha podido distribuirse en librerías. Y también se reunirá con funcionarios de esa provincia, en una suerte de “consultoría urbana”. “Voy a recomendarles que hagan viviendas -anticipa- porque se ha invertido mucho en hospitales, centros culturales, equipamiento urbano, pero falta una política de vivienda”.

 


Puesto a analizar Buenos Aires, cree que “está muy bien, sobre todo los parques, los espacios públicos, que se ven muy cuidados”, pero que habría que profundizar el tema de las veredas, sucias y rotas. E ir más a fondo con las últimas medidas, como la peatonalización del microcentro y la implementación del Metrobús: “Son cambios que llevan su tiempo, a la gente le cuesta aceptarlas”.

 

En cuanto a las bicisendas, cree que Buenos Aires, al ser una ciudad muy llana, es ideal para establecer una red más amplia que la actual. Aunque hace una advertencia: “las bicisendas pueden ser fantásticas, pero no a costa del espacio del peatón, que es siempre el más vulnerable...”.

 

Apunta que “en Buenos Aires, las bicisendas tienen que tomar una dimensión más urbana” y lograr una red de transporte urbano con espacio propio. “Son pequeñas mejoras para el sistema de la ciudad: hay que invertir en el ferrocarril y en el transporte público”, sostiene.

 

A pesar de que aún sigue en el proceso de presentación de su última obra, ya está desarrollando en un próximo libro, con la misma temática de su conferencia en la Bienal, algo así como “de la tipología al diagrama”. “Creo que hay una nueva forma de proyectar, la utilizan Peter Einsenman, Rem Koolhaas, Kayuzo Sejima....sobre todo en la representación gráfica. Los diagramas son como vehículos para hacer el proyecto. También los utiliza Jorge Jáuregui para las favelas en Río de Janeiro. Sejima, por ejemplo, trabaja con unos esquemas geométricos muy simples y a partir de ahí sale el proyecto.”, explica verborrágico. Y agrega su mirada personal: “Pero los diagramas son útiles siempre que tengan que ver con la realidad. El diagrama es un vehiculo abstracto necesario para la arquitectura, para la creación, pero luego se ha de tener muy en cuenta la vida, la experiencia, la participación. El ser humano, pero no como individuo, sino como ser social que acciona esa relación. Los diagramas que conjugan estos dos aspectos como los Sejima o el colombiano Giancarlo Mazzanti, son los avanzan y los que evitan que se convierta en algo demasiado abstracto. En esa tesis estoy trabajando”, finaliza.